Desde 1992, cada primer sábado de octubre se celebra el Día Interamericano del Agua, por iniciativa de la Organización Panamericana de la Salud junto con otros organismos vinculados a la ingeniería de la provisión de agua y el tratamiento de efluentes domiciliarios. Desde hace 21 años esta fecha sirve para promover la reflexión sobre los diferentes aspectos en los que el acceso al agua es un indicador de igualdad o desigualdad de oportunidades para la población.
Cada año el Día Interamericano del Agua propone un lema para analizar, y el de este año resulta especialmente apropiado para reflexionar sobre la situación actual de Balsa Las Perlas, al plantear como tema: «Agua, derechos humanos y gobernabilidad: elementos de la concertación social.»
Es muy iluminadora la manera en que este año el Día Interamericano del Agua adopta el enfoque de Derechos Humanos como definitorio del acceso al agua potable y al mismo tiempo lo vincula con la gobernabilidad (lo cual significa «la democracia representativa», en el marco de la Organización de Estados Americanos que patrocina la celebración); pero también plantea todo esto como parte necesaria en la construcción de una comunidad que funcione en armonía.
Porque si pensamos en Balsa Las Perlas, donde todas las organizaciones e instituciones están de acuerdo en el diagnóstico de que es muy necesario que trabajen de forma articulada; pero eso sin embargo no se logra alcanzar nunca y cada grupo trabaja con su propia agenda incluso a veces rivalizando con otras organizaciones que naturalmente tienen los mismos intereses. ¡Cuánta concertación social nos falta! De acuerdo con el Lema de este año, considero que el hecho de que las familias de Las Perlas accedan a diferentes clases de agua según el barrio de la localidad en el que habiten, refleja una desidia administrativa que ya ha resentido, como consecuencia, el espíritu de la comunidad, dificultando la construcción de acuerdos colectivo.
Cruda, tratada y potable: las clases del agua en Las Perlas
En los barrios de Las Perlas la calidad del agua es inversamente proporcional a su cantidad: las familias que acceden al agua cruda, del Limay o de las napas subterráneas, disponen de mayor caudal que aquellas que reciben el agua por redes o directamente a través de camiones: estás son las que menos cantidad de litros de fluido tienen a su disposición pero reciben el agua de la mejor calidad disponible, al menos en lo normativo.
En los barrios costeros Sector Chacras, Río Sol, Puente Santa Mónica y Santa Mónica, se aprovecha la proximidad con el Limay para instalar sistemas de captación y bombeo, individuales o de a pequeños grupos de lotes aledaños, que impulsan a los terrenos agua sin tratar directamente del caudal del río. En Santa Mónica y Puente Santa Mónica hay también muchos terrenos que cuentan con perforaciones de las que toman agua de la napa, nuevamente se trata de agua cruda no segura según los parámetros del Ministerio de Salud de la Nación y del Ministerio de Salud de la provincia.
La cantidad de agua cruda que los vecinos pueden disponer en estas condiciones responde a limitantes externas, como el suministro eléctrico, la demanda compartida en el caso de los sistemas con diferentes usuarios y los frecuentes robos de equipos de bombeo que sufren quienes instalan sus bombas a la vera del río.
Los barrios Costa Esperanza, Vista del Valle, Primeros Pobladores y El Parque reciben agua cruda por redes vecinales. En el caso de Costa Esperanza el Municipio de Cipolletti, a través de su Delegación en Balsa Las Perlas, opera desde 2020 la red construida por la Cooperativa María del Rosario Lembeye. Los otros tres barrios se abastecen por la red particular del Sr. Pedro Rosas. En ambos casos la Municipalidad mantiene convenios de uso por los cuales abona un canon mensual.
La Empresa Aguas Rionegrinas mantiene la única red formal de Las Perlas, donde el barrio 33 Hectáreas concentra las únicas conexiones reconocidas con usuarios legales y facturación oficial. Cuenta con una estación de bombeo a la vera del río, filtros y tanques donde el agua es tratada con cloro en proporciones calculadas.
También la Cooperativa de Servicios Socio Comunitarios Muten Las Perlas Ltda. cuenta con un sistema de captación y filtrado, tanques de almacenamiento y dosificadores de cloro. El costo del servicio de agua es financiado por las familias asociadas a la cooperativa mediante el pago de una cuota mensual. Con este sistema se abastecen los barrios Militar y Muten I y II.
El agua potable llega a algunos de nuestros barrios en camiones alquilados por la Municipalidad de Cipolletti, que cargan entre 20mil y 30mil litros de agua apta para consumo, potabilizada por la empresa estatal neuquina EPAS en la planta potabilizadora que se encuentra ubicada frente a Balsa Las Perlas en la intersección de las calles Esquel y Futaleufú. Son principalmente familias de los barrios NyC, La Ruca A y B, Costa Esperanza y Río Sol las que dependen de estos camiones para recibir una cuota semanal de agua que deben administrar cuidadosamente.
Hace décadas que miles de familias de Las Perlas se encuadran en una u otra forma de precariedad en el acceso al agua. Hoy mismo hay en funciones en la Delegación Municipal personas que han visto como el problema se descontrolaba bajo su responsabilidad. La municipalidad destina cifras millonarias cada mes para remedar un servicio que no cumple con los elementales estándares de sanidad que son norma vigente en el país, la provincia y la municipalidad.
En la otra punta de los tanques, la gestión de los gobiernos municipales ha sido si cabe aún más indolente, aceptando como natural la proliferación de pozos ciegos que filtran hacia las napas, donde como hemos visto también se levanta agua para uso domiciliario. Las familias se acomodan a estas precariedades, pero la comunidad se va disgregando y construir una sociedad que armonice los intereses de los diferentes sectores se vuelve cada vez más una utopía difícil de alcanzar, por el impacto negativo del desgobierno que padece Balsa Las Perlas desde que fue puesta bajo la administración municipal de Cipolletti.